


Sí, lo sentimos mucho, las últimas entradas han sido quizá demasiado aceleradas, y es que es una manera de transmitir nuestra sensación; la velocidad en la que iban ocurriendo los acontecimientos. Pensad que hemos hecho desde San Cristobal de las Casas (Chiapas, Mexico) hasta nuestro destino actual; San Pedro la Laguna, en una semana y media o algo así, si teneis curiosidad mirad la ruta en el mapa y ya vereis los quilometros que hay!!
Dicho esto; nos quedamos en la anterior entrada en el final de nuestro rally a bordo del Toyota HIACE, medio muertos, con agujetas, con ganas de parar de una vez y conocer un lugar a fondo en el que estar tranquilo y podre reflexionar. En nuestras cabezas ya hacia dias que sonaba una palabra con sabor a utopía..."San Pedro, san pedro, san..." Apenas sabiamos nada de ese lugar, pero teniamos claro que era allí donde terminaba nuestro rally y empezaba de nuevo "la dolce vita" Vol.2. Alguien nos habia dicho que en San Pedro uno se siente más cerca del cielo, incluso alguien ha dicho que el propio San Pedro es donde està el cielo... sólo con estas referencias llegamos al embarcadero de Panajachel donde salen las lanchas hacia allí...Con la sola visión del Lago Atitlán algo en mi interior me dijo que sí, que pronto llegaria la calma, solo habia que cruzar este lago fantástico, y efectivamente, podia comprovar que el cielo estaba en la otra orilla... o no pensariais esto mismo viendo esta foto hecha desde el embarcadero de Panajachel?? Cruzamos el lago con la compañia de un historiador norteamericano totalmente pasado de vueltas... y nos contó que San Pedro era uno de los pocos lugares en el mundo donde jamás llegó el otoño en aquel mágico verano del amor de 1967. Al poner los pies por primera vez en el embarcadero de San Pedro, me di cuenta que el turismo hippie era otro tipo de industria a explotar... pero a pesar de que no eramos los únicos en nuestra aventura, y que por las esquinas puedes llegar a escuchar a alguien parlant amb català, yo seguia empeñado en que realmente en ese lugar uno esta más cerca del cielo... y siguiendo el camino por fin lo encontré: Era San Pedro de verdad!! Allí estaba, alto, fuerte, y de un color como gris, con las llaves del cielo colgando de su mano derecha justo en frente de las puertas del cielo mismo. No lo podia creer!! Era cierto, entonces, lo que decia la gente!! Le pregunté a Luis, el propietario de la posada en la que paramos: "¿Es cierto entonces que en San Pedro, uno se siente en el cielo?" Y Luis, que es muy sabio, me dijo: "Eso dice la gente, pero en realidad, el cielo, uno lo lleva en su interior!" No supe que decir después de esto y me quedé callado... Luego bajé la cuesta, y por la calle principal del pueblo me fui cruzando con gente que iba descalza, con el pelo largo, y que no parecian muy guatemaltecos... la calle olía bien, especialmente bién!... y de repente pensé que en San Pedro habia mucha gente que; como me habia dicho el sabio Luís; llevan el cielo en su interior. O algo así...
...ja us anirem explicant com va per San Pedro, de moment... descansant... (ja veieu que el blog es cada dia més bilingüe eh??) així ho pot llegir més gent... petons!